Experiencia con el spray Hondrolife de Esmeralda de Darmanesti
La juventud tiende a reírse de la vejez y de las llagas propias de la edad, y recuerdo bien cómo me burlaba de mi abuela, que sufría de artritis, y de mi madre, que tenía artrosis en la articulación de la rodilla. Entonces sus historias sobre dolores y dificultades en el movimiento me parecieron descabelladas para llamar más la atención. Bueno, cómo no pensar si la abuela gemía y se quejaba de que no podía insertar un hilo en la aguja, y su madre se compraba un bastón, aunque cuando no había extraños cerca, se las arreglaba bien sin él. Pero después de que cumplí cuarenta, de repente sentí todas las delicias de su condición. Al principio noté que mi pulgar derecho estaba entumecido, luego hubo sensaciones desagradables en el codo y luego apareció el problema principal: la articulación del hombro. Al principio, no estaba muy enfermo, pero periódicamente, el síndrome de dolor se intensificó y comenzó a manifestarse incluso cuando estaba en reposo. Me di cuenta de lo grave que es el problema, notando que constantemente me aferro a mi hombro dolorido, tratando de masajearlo, pero esto no ayuda. Al final, fui a entregarme a los médicos.
La medicina gratuita no se respeta en nuestro país, por lo que tuve que pagar una buena suma por consultas, exámenes y pruebas. El médico diagnosticó artrosis de la articulación del hombro derecho, resultó que debido a la falta de líquido sinovial, el tejido del cartílago comenzó a romperse, comenzaron a formarse crecimientos que provocaron un dolor intenso. El médico le recetó un montón de ungüentos, pastillas, le recetó un masaje terapéutico, le recomendó un sistema de ejercicios para entrenar y un vendaje para mover menos el brazo. ¿Necesito decir cuál fue la cantidad final? No, yo, un ciudadano respetuoso de la ley, compré todo esto, comencé a mancharme, beber, hacer, ir a las sesiones y hasta me sentí mejor. Pero después del final del tratamiento, pasaron dos meses y la mano comenzó a doler nuevamente. Y luego me rescató un caso, un amigo de mi hijo, un atleta profesional, al enterarse de mi problema, me aconsejó el spray Hondrolife, que él mismo usa para mantener sus articulaciones en orden. Luego, yo mismo busqué en el sitio web oficial una revisión del producto, indicaciones de uso, cómo usarlo.
Usé Hondrolife de acuerdo con las instrucciones, durante 30 días. Aplicar dos veces al día, mañana y noche, en el hombro. El empaque resultó ser muy conveniente, con un dosificador económico. El olor es agradable, mentolado, la composición se absorbe rápidamente. El resultado ya se notó en la primera semana: se fue un dolor molesto y constante. En la segunda semana, noté que subo y bajo el brazo sin ningún problema, no hay una sensación desagradable de arena en la articulación, como si se moviera con dificultad. Ahora han pasado dos semanas desde que terminé de usar el spray, no siento ninguna molestia, mi hombro está bien. Por cierto, la radiografía mostró que la destrucción del cartílago se había detenido.